miércoles, 29 de mayo de 2024

- Arbanasi, iglesias escondidas

Arbanasi es un pueblo del municipio de Veliko Tarnovoprovincia de Veliko Tarnovo, situado en una meseta entre las grandes ciudades de Veliko Tarnovo (cuatro kilómetros de distancia) y Gorna Oriajovitsa.

A pesar de su pequeño tamaño, Arbanasi que se encuentra a solo 4 kilómetros de Veliko Tarnovo, cuenta con ambiente muy agradable y varios restaurantes en los que sentarse a degustar gastronomía local.

Es conocido por su rica historia y la gran cantidad de monumentos históricos, como las iglesias de los siglos XVII y XVIII y ejemplos de la arquitectura del renacimiento nacional búlgaro, que lo han convertido en un popular destino turístico.

La pequeña Arbanasi, con menos de 300 habitantes, alberga uno de los mejores conjuntos arquitectónicos del Renacimiento nacional búlgaro.

                Entrada a una de las iglesias antiguas y debajo, su interior

Varias fuentes históricas, e incluso el propio nombre de Arbanasi, sugieren que la población original de la aldea era albanesa, ya que, a lo largo de la Edad Media y el dominio de los otomanos, muchos albaneses se trasladaron a esta parte de los Balcanes formando comunidades. Muchos de ellos fueron luego absorbidos por la mayoría búlgara, o reasentados en Transilvania a principios del siglo XIX.

            El muro lateral de la iglesia en forma de granero para evitar la persecución 
                            Puerta de entrada a la iglesia, abajo su interior
                Una imagen del interior de la iglesia de Arbanasi (visitantes atendiendo a la guia

Los cristianos albaneses que fundaron Arbanasi probablemente eran personas de Épiro, reasentados aquí después de la invasión otomana de los Balcanes Occidentales. Aquí, en su nuevo hogar, experimentaron varios siglos de prosperidad. 


Desde el exterior, los muros de piedra desnuda de esta iglesia del siglo XVII impiden adivinar los espléndidos colores, figuras y escenas religiosas que aguardan en su interior. Al llegar y atravesar la puerta de madera del muro que la rodea, en realidad parece que vas a visitar un almacén ¿Esto es realmente la Iglesia de Arbanasi?

La Iglesia de la Natividad de Cristo, también conocida como Iglesia Rozhdestvo Hristovo, es la más antigua y la más espectacular todas las atracciones culturales históricas de la aldea de Arbanasi, a escasos 10 kilómetros de Veliko Tarnovo.


                     El muro lateral de la iglesia en forma de granero para evitar la persecución 
                                        Debajo algunas de las pinturas del interior


El pueblo y sus alrededores eran propiedad personal de una larga lista de dignatarios otomanos, incluido un yerno del sultán Süleyman el Magnífico, y los habitantes estaban exentos de una serie de impuestos. Esto convirtió a Arbanasi en un lugar privilegiado para hacer negocios: lana, carne o joyas, y para comerciar en todo el imperio. Inevitablemente, otras nacionalidades comenzaron a llegar, aumentando la población de la aldea cuatro veces en el transcurso de varias décadas. En cierto punto, Arbanasi tenía una población mayor que la vecina Tarnovo.

La mayoría de estas personas, albaneses, griegos y walachianos, abandonaron Arbanasi durante las incursiones de bandidos del siglo XVIII y nunca regresaron. A principios del siglo XIX, la población del pueblo ya era predominantemente búlgara.

En esta histórica población, cuyos orígenes se remontan al 1538, llegaron a levantarse unas 1000 casas durante dicho periodo. La mayoría pertenecían a artesanos y comerciantes que se enriquecieron negociando con valacos, rusos y polacos.

El nombre del pueblo deriva de la palabra Arbanas que significa «albanés» en búlgaro medieval. Durante la era otomana, el término turco Arnavud que significa «albanés» también se usó como un nombre para el pueblo. Desde 2015, Arbanasi tiene una población de 349 habitantes.

Además de pasear sin rumbo admirando sus casas, os sugerimos visitar la Iglesia de la Natividad para contemplar sus bellos iconostasios.


La Iglesia de la Natividad de Arbanasi

Arbanasi destila encanto por sus cuatro costados. Esta pequeña aldea de apenas un puñado de calles empedradas concentra una cantidad de monumentos y edificios históricos impresionante. 

Entre todos ellos, destaca la Iglesia de la Natividad o Iglesia Rozhdestvo Hristovo. 

Sus recios muros exteriores no hacen presagiar el espectáculo que encontraremos en su interior, un conjunto de pinturas murales de extraordinario valor y gran espectacularidad visual. Sin duda, un lugar que ver en Bulgaria imprescindible.

Hay quien llama a la Iglesia de la Natividad de Arbanasi, la Capilla Sixtina de Bulgaria. Pero yo creo que quien puso en nombre se quedó corto. Pues si Miguel Ángel retrató con maestría cada una de las escenas de la Capilla de El Vaticano, la afluencia de turistas le resta, en mi opinión, esa aura de misticismo que te lleva a Dios y que sí se encuentra en Arbanasi.

La Iglesia fue construida a partir de las donaciones de comerciantes ricos e impresiona por sus murales. La mayoría de ellos datan de los años 30 del siglo XVII y están perfectamente conservados.

La construcción de la Iglesia de la Natividad, pese a su planta rectangular, posee una laberíntica distribución de sus estancias ya que, desde el naos o nave central, se accede por una pequeña puertecita a un nártex, usado como estancia para mujeres, que lleva a la capilla de San Juan Bautista – su patrón-, y también posee una larga galería.

Pero lo que realmente sorprende de esta Iglesia es que cada centímetro de sus muros se encuentra decorado. Además de las pinturas bíblicas tradicionales de la vida de la Virgen María, el árbol de Jesé en el Nartex, hay imágenes de antiguos filósofos y poetas griegos, como Homero, Aristóteles o Platón que reflejan las tendencias humanísticas de la época.

Entre los murales de la capilla más interesantes e impresionantes se encuentran esas escenas dedicadas a San Juan Bautista.

El iconostasio está hecho con precisión y es una obra maestra del tallado en madera tradicional búlgara

La rueda de la vida

Una de las pinturas más populares de la galería es La rueda de la vida, que se combina con los signos del zodíaco. En esta composición se muestra la relación filosófica entre el zodíaco, las estaciones y la vida humana.


Los frescos tenían representaciones auténticamente reconocibles de las escenas bíblicas, de los Santos conocidos, de la Dormición de la Virgen. Y tan embobados estábamos que ni caímos en la cuenta de que, aunque está prohibido hacer fotos, como en el resto de templos ortodoxos, debíamos aprovechar la ausencia de vigilancia –eso sí, cámaras había por un tubo- para ilustrar esta entrada. Así que, nos dimos la vuelta, y disparamos a diestro y siniestro.



Los investigadores creen que el interior de la iglesia de la Natividad es la descripción más grande y detallada de los temas y motivos cristianos en Bulgaria. Además, el altar tallado en madera del siglo XVII es también uno de los más antiguos y mejor conservados del país.

Pero la Iglesia de la Natividad no es la única Iglesia con murales que posee Arbanasi. Construidas en la época de mayor prosperidad, entre los siglos XVI y XVIII, cuando Arbanasi era lugar de 1,000 hogares y 11 sacerdotes, la aldea cuenta con cinco iglesias y dos monasterios, además de una casa-museo.

La Iglesia de los Santos Arcángeles Miguel y Gabriel. Dos de las pinturas murales más interesantes de la iglesia son “Descenso a los infiernos” y “El Nacimiento de Cristo”.


El Templo de San Demetrio, no abierto a visitantes.

La Iglesia de San Jorge, no abierto a visitantes.

El Templo de San Atanasio, no abierto a visitantes.

El Convento femenino de la Santísima Virgen. El monasterio preserva el icono milagroso de la Virgen Troerouchitsa, que también se denomina “María llorando” porque se enterró después que las monjas huyeran de las tropelías de los Otomanos y un campesino lo encontró después de oír los gemidos que surgían de la tierra.

Monasterio de San Nicola con la Capilla de San Elías. En la iglesia de San Nicola hay otro icono milagroso de María. Según la leyenda, ella ayuda a las mujeres que quieren ser madres y que obligatoriamente deben realizar el siguiente ritual: después de la oración ante la Virgen María, se coloca una moneda en el icono; si la moneda se pega, la Virgen oirá la oración; si la moneda se cae, el deseo de tener un niño no se cumplirá.









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